Odiando,
Odiando,
Odiando,
Odiando,
Odiando,
Llorando,
Llorando,
Llorando,
Callando,
Callando,
Callando...
La verdad,
en este preciso momento
el llanto triunfa y vence a el temple...
temple ¿que temple?
aquel forjado de llanto y resentimiento?
Resentimiento,
forjado por el temple echo del llanto...
Circulo vicioso...
Que decir¿?
Si las palabras sobran,
si tan solo para hablar
solo hace falta mostrar
aquellas marcas y golpes en cuerpo y mente...
Las ganas homisidas tiemblan
tiemblan frente a ese cuerpo sucio...
se quiebra la decisión y vuelven los recuerdos amargos de una infancia...
Te mataré!
Te mataré!
Ya veraz... Te mataré!!!!!!!!!!!!
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